Escrito por: Encías Sangrantes

• Resilient
• The Art Of Resilience(2021)
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El cerebro detrás del proyecto denominado Resilient es el músico chileno Abel Méndez y “The Art Of Resilience” es su primer lanzamiento.

En la producción, dominada por el sonido death metal de la vieja escuela, Méndez interpretó todos los instrumentos e hizo de vocalista. Para darle un sello a este primer trabajo, sumó a Matías Quiroz como guitarrista invitado para interpretar los solos. El resultado es bastante potente y auspicioso de cara al futuro.

Si bien es un trabajo hecho a pulso, del cual Méndez a relatado en algunas notas de prensa que es “conceptual”, se notan claramente las influencias musicales que él alude. Hay mucho de death metal, con un rol de bajo bastante protagónico, tintes de thrash metal y algunos momentos que rozan al punk.

Intro (“Origin”), la introducción, es armónica e invita a poner atención, sin mediar ni menos avisar lo que se viene. “The Dark Room” es el primer capítulo y de golpe aparece todo el poder que irradia el disco. Las letras, según Méndez, no se enfocan en temas satánicos, ni rituales o algo de ese estilo, sino serán de “cosas reales que suceden casa día en la vida de muchos niños en el mundo y que tienen repercusiones en el resto de su vida”, según comentó en algunas notas de prensa. Esa línea se mantiene a lo largo de todo el LP.

“Vominting Blood” es una de las cumbres del disco. Comienzo atronador con el bajo dejando todo, para después adentrarse en un sonido cargado de thrash, ese de la vieja escuela, el más adictivo. Tiene momentos melódicos que convergen con fluidez. En esta canción, el solo de Quiroz le aporta un sello único para regresar al pulso acelerado del comienzo, no antes sin transitar por un pasaje denso, pero acertado.

“Black Clouds” tiene un inicio un tanto más calmado, pero no por eso menos pujante. Las letras nuevamente se destacan aludiendo al concepto entregado por Méndez. La canción fluye y avanza con naturalidad por los estilos que definen al álbum, bien cargado a la escuela de Death.

Interlude (Climax) tiene otra vez al bajo como un actor principal. Este breve puente sigue la línea de la primera pista del disco para dar paso al último golpe: “Sarching for Balance”. Enérgico y tupido comienzo, con algunos toques doom, que desembocan en un solo de Quiroz. Después pura fuerza desbocada y que dan la impresión de un galope que va y viene. El track que cierra el álbum podría considerarse el más variado, sin dar mucho respiro, pero bien logrado.

“The Art Of Resilience” aprueba con nota azul. La capacidad de Méndez queda en manifiesto en la composición y en la interpretación de cada instrumento. Es de esperar que este proyecto agarre más fuerza y en el futuro aparezcan nuevas producciones que permitan ver el desarrollo y, ojalá, crecimiento de Méndez en esta arista de su carrera musical. Así creemos que será.