El heavy metal se tomó el Teatro Cariola (2022)

Escrito por: Equipo SO

Eran las 18:00 horas y partió la aventura para asistir al Heavy Fest en el antiguo Teatro Cariola. Una particular lluvia que no teníamos hace años decidió alojarse en toda la región Metropolitana. Calles anegadas o comunas sin luz no serían impedimento para asistir al festival, ya que la música mueve más que la incertidumbre (al menos para mí).

Las bandas que abren al cabeza de cartel, Tim Ripper Owens, solo las conocía por nombre, por lo que me motiva mucho llegar a la hora para analizar los proyectos y, por supuesto, disfrutar si es que fuese necesario. Son las 18:40 y lamentablemente aún hay poca gente (la lluvia espanta a los cagones). Las 150 personas que hay a esa hora esperan con ansias el inicio del fest. Las luces rojas predominan en el carretiado Teatro Cariola (el día anterior se presentó Angra). Un escenario simple, pero efectivo y sin mucha parafernalia. Sin telón ni nada parecido. Algo que se perdona en el metal solamente. También predominando los paraguas y gorros de lana por doquier.

Valkhya. Un nombre extraño y difícil de recordar, pero tocando e interpretando un excelente metal sinfónico de esos que gustan y que quedan en la mente. Destacar la buena voz y buena interpretación sonora de todos. Interpretando temas antiguos y nuevos , rescatando un buen sonido en todo momento y en donde el negro prevalece en sus 5 integrantes. Sin duda una joya en bruto que aprovechó su momento en el escenario y que desde esta fecha jamás olvidaré (fotos acá).

Ahora es el turno de Letalis, otra banda que no conozco y que por supuesto tengo ganas de degustar. Desde el principio hasta el final la banda demostró todo el thrash y heavy metal clásico de calidad que se hace en estas tierras de Chile, con una excelente frontwoman que lo dio todo y más. Buenos gritos y una voz para recordar, siempre acompañada de una gran banda en todos sus instrumentos y que nunca estuvo estática. Prendiendo al Teatro Cariola como corresponde, una grata sorpresa. A estas alturas, ya el teatro se encontraba a la mitad de su capacidad (fotos acá).

Heiligen es la tercera banda en presentarse en el Heavy Fest y nunca he podido verla en vivo por lo que la expectativa también es alta, ya que es una agrupación que veo cómo se mueve desdehace varios años. Realmente un gran proyecto, se nota la experiencia y el rodaje. Show sólido y significativo del cuarteto, entregando una potente dosis de metal nacional. Una verdadero combo en el hocico a través de buenos riff y buenas canciones (de eso se trata todo esto). Temas en castellano e inglés retumbaron en todos los cerebros de los presentes (fotos acá).

Trend kills Ghosts, otra de las bandas populares en el estilo, originarios de Brasil, que no había podido ver nunca en vivo, por lo que nuevamente la emoción me embarga como un niño en la segunda visita de la banda a Chile. En este momento, la batería principal ya fue desenfundada y los amplificadores de guitarras y bajo están listos para rugir. Un heavy metal más cercano a un powermetal que destaca con una voz prolija y una ejecución perfecta por parte del quinteto. El sonido realmente funciona de forma perfecta. Una excelente apuesta por Atenea y Chargola.

Tim Ripper Owens, leyenda viviente del heavy metal internacional y originario de los Estados Unidos, se hizo conocido en el mundo del metal por reemplazar a Rob Haldford en Judas Priest en los años ’90. También vocalista de otras leyendas del metal como KK Priest, Yngwie Malmsteen, Iced Earth entre otros proyectos….

Este era el plato fuerte del Heavy Fest y creo que realmente muy merecido su rol de acto estelar. Con puntualidad, el artista logró desatar la locura desde el inicio hasta el fin del show, con clásicos de Judas Priest, temas desde su trinchera y con su particular estilo entregándonos himnos como «The Ripper»,»Breaking the law», «Electric Eye», «Metal Gods», «Living After Midnight». Una voz única e irrepetible en muy buen nivel. El artista también tuvo momentos sonoros con temas de Iced Earth, KK Priest y un hermoso tributo a Dio que desató la locura en Teatro Cariola. Sin duda, estos son los recitales que uno agradece asistir y que quedarán en la memoria colectiva de quienes asistimos.

Destaco la humildad del artista y su genuina participación en los escenarios. Se nota que la leyenda viviente del heavy metal disfruta lo que hace y no es solo un trabajo, se nota la pasión y el corazón que le pone a cada nota interpretada. Felicitar a Atenea y Chargola, por jugársela por el metal nacional e internacional.

Galería completa acá.

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